Un bocado es en andaluz o cordobés, un bocao. “Porción de comida que se toma de una sola vez, mordiendo lo que se come”. O bien “cantidad pequeña de comida”. De ambas formas lo define el diccionario de la Real Academia, y las ofrece la nueva taberna El Bocao de muy diversas maneras. Este negocio regentado por Óscar Crespo y Raquel Morales ha abierto recientemente sus puertas en Escritor Cristóbal de Mesa, en Sagunto, en el mismo local que ocupó un clásico del barrio, Cárdenas, durante más de 20 años.
Morales procede del Grupo La Carbonería y también tuvo negocio propio, El Pisco, mientras que Crespo ha trabajado en lugares como Pizzaiolo El Brillante y también La Carbonería. Al margen de esos sitios cuentan con una dilatada experiencia que ahora pretenden desarrollar en una animada zona del barrio de Sagunto, donde curiosamente hay pocos sitios para comer, sí muchos para tapear.
Ese hueco es el que pretende llenar El Bocao, con el concepto de taberna, y además diferenciándose de otros establecimientos al prestar una atención especial al pescado fresco, como boqueroncitos, salmonetes, sardinitas o pez araña. Eso sin descuidar la carne (presa, chuletón, churrasco, solomillo ibérico, chuletitas de cordero) o todos los platos típicos de la cocina tradicional cordobesa, desde las berenjenas, al salmorejo o el flamenquín.
Crespo es natural del barrio y vio la posibilidad de continuar en cierto sentido con el legado del Cárdenas, aportando una visión personal a la anterior trayectoria.
El Bocao abre para los desayunos desde las 8:00, con las tostadas habituales, y siguen hasta el cierre de forma ininterrumpida.
La decoración del lugar es sencilla y busca un punto de unión entre la taberna tradicional y la más moderna. Cuenta con un interior amplio y una terraza igualmente amplia y con toldos, lo que hace idónea a la taberna en épocas frescas.