Localización
La Casa de las Empanadas ha abierto esta semana su tercer establecimiento. Está situado en la calle Muhammad Iqbal, 1, al lado de la Avenida de Barcelona. Esta empresa se originó en su local de Gran Vía Parque hace seis años. En principio era una panadería con cuatro variedades de empanada. El éxito de las empanadas fue tal que la panadería dio lugar a un sitio especializado con muchísimas variedades. En abril del año pasado abrieron la segunda tienda, en Avenida Virgen de Fátima nº 46. La empresa planea trasladar su obrador del polígono de Las Quemadas también a un piso de arriba de Muhammad Iqbal para mediados del año que viene aproximadamente.
Este comercio tiene su origen en el trabajo conjunto de María Luisa Pendón y Francisco Rodríguez, que son cuñados. Actualmente las tres tiendas funcionan independientemente pero tienen en común el mismo obrador, dirigido por Pendón, quien a su vez se ocupa de la nueva tienda junto a la Avenida de Barcelona.
Si, como indicamos, el negocio empezó por cuatro empanadas, que luegon fuero 16, y luego más, y luego más…. en Muhammad Iqbal ofrecen hasta 45 variedades distintas. Las especialidades de la casa son espinacas, salmón y filadelfia; pollo, pimientos rojos y queso de cabra; y pollo, champiñón y queso de cabra. Los tamaños para todas: pequeña, mediana y familiar, por 5, 10 y 17 euros respectivamente. Entre las muchas posibilidades están morcilla con manzana; queso y pepperoni, pollo al curry, bacalao, pisto y pasas; jamón serrrano, tomate natural y aceite de oliva; carne de membrillo y queso de cabra; criolla, boloñesa; carbonara; york y queso, atún con tomate o salchichas tres salsas.
Los ingredientes son de primera calidad y la elaboración en el obrador artesanal. En la tienda se hornean. Además de las empanadas hay otros productos propios de la panadería y bollería, pero esta casa es La Casa de las Empanadas por algo. Ese producto es la estrella y el resto acompañantes.
La tienda de Muhammad Iqbal ha seguido la tónica de la segunda tienda, la de Fátima, ofreciendo un espacio amable, diáfano y cómodo. La elección del sitio fue por las preferencias de María Luisa Pendón, a quien le gustaba mucho la zona, cuyo movimiento comercial constante conocía de sobra por ser vecina del cercano barrio de San Agustín. ¿Llegarán pronto a cincuenta empanadas? Hagan apuestas.