Resulta difícil conocer la fecha exacta de nacimiento de la empresa cordobesa Viuda de Victoriano Gómez, puesto que anteriormente perteneció a quien fuera un conocido comerciante de Córdoba, miembro de la junta directiva del Círculo Mercantil, Victorio Bartolomé Milla. Como otros cordobeses de adopción, procedía de la inmigración interior soriana que se dio a a finales del siglo XIX y principios del XX, y a los que la ciudad debe muchos éxitos empresariales y comerciales.
«Fue un hombre que no tuvo hijos, y tomó como ahijado, algo normal en la época, a mi bisabuelo, Victoriano Gómez, que era su cuñado», rememora el miembro de la cuarta generación de la empresa, el consejero-delegado de Viuda de Victoriano Gómez, José Román Gómez. La industria de Victorio Bartolomé Milla, a tenor de las referencias en la prensa histórica, ya existía en la segunda década del siglo XX, y en la tercera ya estaba en manos de Victoriano Gómez, en concreto en 1922. José Román Gómez nos muestra además algún antiguo albarán del año 1917, que pueden observar en la galería de fotos. Victoriano Gómez, natural de Azuaga, en Badajoz, había estudiado filosofía y letras y fue profesor de instituto en Madrid.
De la misma forma que en la galería de fotos se ven algunas de las primeras ubicaciones de la empresa. «La empresa ha tenido tres ubicaciones en Córdoba, siempre en Córdoba capital, primero en Ronda de los Tejares, luego en periodista Quesada Chacón, donde tuvimos un apartadero en el que entraban los trenes directamente a descargar, y ahora en el polígono Amargacena, donde llevaremos desde el 2000 ó 2001», detalla Gómez. Era común hace décadas que muchas industria de diverso tipo se repartieran por lo que hoy es el centro comercial o por zonas de Ollerías o Alonso el Sabio.
Se trata ésta de una empresa conservadora en el mejor sentido. En su más de un siglo de existencia se ha dedicado siempre a lo mismo. Por una parte a la fabricación de hierros, antaño destinados a talleres de herrería y mecánicos aladreros, caldererías, fundiciones de hierro, minería o construcción y hoy en día fundamentalmente a la construcción o reformas. Por otro lado a los artículos de suministro industrial de ferretería. Victoriano Gómez murió en Córdoba el 14 de Mayo de 1931, heredando el negocio su viuda, Lauden, e hijos. Entonces la viuda, debido a las costumbres de la época, no podía poner su nombre al negocio aunque lo regentase.
Desde entonces la empresa, manteniéndose como hemos indicado en un sector muy determinado, ha ido adaptándose a los tiempos fundamentalmente en cuanto a tecnología, logística, almacenaje o tratamiento de la información, pero manteniendo la esencia que le hizo pionera a principios del siglo XX y que más de cien años después sigue siendo una de las entidades más importantes de su sector.
