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El empresario cordobés Andrés Cubero, natural de Doña Mencía, lanzará al mercado dentro de unos días una kombucha también cordobesa, y en concreto tres tipos de esta bebida con la marca La Kombi Kompleta. Los sabores son limón y albaricoque, naranja disecada y naranja con albaricoque. La kombucha es fundamentalmente un té fermentado. También es conocida por ello como té kombucha, o también hongo de té, hongo manchú u hongo chino. Debido a sus propiedades probióticas se ha hecho enormemente popular en España en muy pocos años.
El estilo por el que ha optado Cubero, dentro de las posibilidades que ofrece la elaboración, es el de un kombucha suave y con poca presencia en el sabor de los hongos y bacterias presentes en el proceso. Esto hace que las kombuchas La Kombi Kompleta sean equivalentes a un refresco, evidentemente mucho más saludable, y con cantidades ínfimas de alcohol.
El proyecto de las kombuchas se completará dentro de unas semanas con la comercialización de una bebida de kefir de agua, un tipo de agua carbonatada, sin rastro de alcohol. Los tíbicos o kefir de agua son un cultivo de bacterias y levaduras que se emplean para fermentar por ejemplo agua con azúcares. En el caso de esta bebida de kefir de agua se incluirán en el proceso de elaboración algunos productos de la tierra, como naranjas, limones o fresas.
CON EL HIDROMIEL EMPEZÓ TODO
El empresario menciano diversifica así sus productos, puesto que empezó con un hidromiel y cervezas artesanas. Ambas tuvieron en principio el nombre Andros. En breve las cervezas artesanas pasarán a comercializarse con la marca And Through Beer, juego de palabras entre la expresión en inglés «…y tirar cerverza» y el nombre de Andrés, «en el caso de que lo pronuncies rápido», explica Cubero con gran sentido del humor.
Con presencia en negocios de hostelería del sur de la provincia y la capital, entre otros El Churrasco, Doble de Cepa y Becquer, Cubero se ha propuesto el reto de introducir el hidromiel como bebida habitual en bares y restaurantes. Al tratarse de una bebida en desuso, la recuperación de los últimos años se debe fundamentalmente a mercados medievales, ya que se vincula a esa época o los vikingos de forma folklórica. Sin embargo queda un campo abierto para la hostelería convencional, en donde se buscan cada vez más bebidas alcohólicas sin graduación excesiva y sabor frutal. En este caso, el hidromiel Andros tiene un 6’2% de alcohol y en su elaboración -y aquí se diferencia de otras- se emplean fresa, mora, grosella, grosella negra, uvas pasas, escaramujo, manzana, piña, papaya o bayas de saúco.
El menciano se introdujo en el mundo del hidromiel a partir de su trabajo en los negocios familiares, en concreto dos conocidos restaurantes de este pueblo: Restaurante Dalia y Dalia Parque. Al empezar a traer al lugar una gran variedad de cervezas artesanas le picó el gusanillo de elaborarlas pero se decantó por el hidromiel por ser menos común. Sus primeras pruebas fueron en el 2017 en su propia casa y con una olla. «Mi primer fermentador fue una garrafa con un globo pinchado», recuerda. A partir de ahí comprobó que los hidromieles habituales tendían a tener demasiado alcohol y resultar igualmente demasiado secos, por lo que bajó la graduación e introdujo toda la comentada variedad de frutas además de otro elemento indispensable en Andros: miel cruda de romero. Las primeras botellas eran recicladas y con etiquetas hechas en una papelería. Ahora se vende por miles de litros.
Para sacar al hidromiel de las constantes referencias medievales, pues se considera la bebida alcohólica más antigua del mundo, escogió la marca Andros, por referencia a la isla griega y de paso a Andrés, nombre siempre presente en las tormentas de ideas de la casa. Esa misma marca sirvió luego para las cervezas artesanas, que como indicamos anteriormente ahora pasarán a llamarse And Through Beer. En este caso se comercializarán una blonde, una irlandesa rojo y una de trigo.
La idea de Cubero, que produce de forma nómada (no tiene fábrica propia) sería fabricar todos sus productos en Doña Mencía. Además de en la hostelería, el hidromiel y las cervezas, y pronto las kombuchas y el kefir de agua, se pueden comprar también en la web La Despensa de la Subbética, puesta en marcha también por este joven empresario.